Nunca me atreví a tocar tu piel...
tan sólo era rozada en mis deseos
Y nunca me atreví a darte un beso...
pero bebí tus labios en mis sueños
Jamás me imaginé tenerte cerca…
por eso me alejé como una loca…
y ahora que me encuentro en tu mirada
estoy loca por tu amor, loca del alma!
Eileen Ovalle
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