Sublime…es el reflejo de la luz en tus ojos
obra perfecta de los amaneceres de tu alma…
contigo he de sublimar mis propios instintos…
porque tocarte eleva mi tacto y mis sentidos…
Tu piel como arcoiris incontenible de caricias…
donde viajan las pasiones vestidas de colores…
sublimiza los matices eternos de la vida…
cada vez amado mío cuando en ti mi alma anida…
Sublimes…son las hondonadas de tus cabellos
los que se mecen al viento como encaprichados
los que puedo acariciar cuando apenas te tengo…
como sujeto en las noches que llevo en mis brazos…
Y esas manos que parecen laberintos de sentidos
donde por tu amor llego a perder hasta el sentido…
son sublimes... como el grito del delirio…
que me guía hacia tu vientre y su destino…
Sublimes… son tus labios nacarados como ensueño
los que parecen de fino y adorado terciopelo…
aquellos que rodean mi piel y mis anhelos…
esos labios tuyos vida mía… con sabor a cielo…
Los mismos que se han rozado con mis besos…
los mismos que han fluido como ríos…
cuando con tus gemidos te has perdido como un niño
en las curvas magistrales de la piel que hay en mis senos…
Eileen Ovalle
1 comentarios:
Sin más palabras que decir Eileen acabas de describir lo que es el verdadero amor. Y solo quien lo conoce puede describirlo con tal precisión. Enhorabuena por tí!
Roberto Alvarez
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